lunes, 30 de junio de 2014

Inspiración de tontinovela. (Cap.1)

-Y es que es...
-¡Para el carro muñeca! Llevamos dos horas al sol y tú una y media restregándonos lo mono que es y lo bien que...
-¡No lo repitas! Carla lleva razón. No entiendo porque te obsesionas en esconder esta historia diciendo que es un rollo y haciéndote la fuerte diciendo "No quiero definirlo" cuando eres biologícamente incapaz de tener un rollo.
-Es cierto. No se lo que tenemos pero me gusta tal y como lo tenemos.
-Yo solo te pido que disfrutes de este sol y que como vuelvas a hablar de las maravillas de ese tío, me voy a dedicar a robártelo y tirármelo. Prometido
-¡Carla eres una jodida salvaje!
Las tres chicas sonrieron.
Carla, "la burra". Folladora de todo bicho con patas. Sin sentimientos. Solo sexo, sexo del bueno. No cree en el amor y mucho menos en todas esas bobadas que Natalia estaba contando. Natalia, "la enamoradiza", aquella que dejaba el corazón en las relaciones y que se pillaba demasiado rápido. Y Marga, "la racional", quien pensaba los proos y contras de todas las situaciones y la solucionadora de conflictos.
Tres amigas, tres polos opuestos, pero tres almas unidas. Tres jovencitas de 20 años con ganas de disfrutar del mejor verano de sus vidas. Con sus propósitos.
Carla se buscaría a un guiri para tirarselo todo el verano. Marga tenía varios proyectos en mente (se incluía hacer ejercicio, comer sano y ponerse morena) ¿Y Natalia? Natalia solo tenía que preocuparse de aquel chico de ojos claros que le había robado el corazón (y las bragas, según Carla) desde aquel ocho de Mayo y disfrutar de esos dos meses sin él. Y es que aquel chico se  había convertido, sin querer en una parte esencial de su vida...

jueves, 19 de junio de 2014

Co-Razones

No hace falta que me digáis eso de que perdéis la cabeza por eso de que sus caderas. Ya se de sobra que tiene esa sonrisa y esas maneras y todo el remolino que forma en cada paso de gesto que da. Pero además la he visto seria, ser ella misma y en serio que eso no se puede escribir en un poema. Por eso, eso que me cuentas de "Mírala como bebe las cervezas" y como se revuelve sobre las baldosas y que fácil parece, a veces, enamorarse. Todo eso de que ella puede llegar a ser ese puto único motivo de seguir vivo y a la mierda con la autodestrucción. Todo eso de que los besos de ciertas bocas saben mejor es un cuento que me se desde el día que me dio dos besos y me dijo su nombre. Pero no sabes lo que es caer desde un precipicio y que ella aparezca de golpe y de frente para decirte "Venga, hazte un peta y me lo cuentas". No sabes lo que es despertarte y que ella se retuerza y bostece, luego te abrace y luego no sepas como deshacerte de todo el mundo. Así que supondrás que yo soy el primero que entiende que pierdas la cabeza por sus piernas, y el sentido por sus palabras, y los huevos por un mínimo roce de mejilla. Que las suspicacias, los disimulos cuando su culo pasa, las incomodidades de orgullo que pueda provocarte, son algo con lo que ya cuento. Quiero decir, que a mi de versos no me tienes que decir nada, que hace tiempo que escribo los mios. Que yo también la veo. Que cuando ella cruza por debajo del cielo, solo el tonto mira al cielo. Que se como agacha la cabeza, levanta la mirada y se muerde el labio superior. Que conozco su voz en formato susurro y en formato gemido y en formato secreto. Que se sus cicatrices y el sitio donde la tienes que tocar, en el este de su pie izquierdo para conseguir que se ria. Y me se lo de sus rodillas. Y la forma de rozar las cuerdas de la guitarra. Que yo también he memorizado su número de teléfono. Pero también el número de sus escalones, y el número de veces que afina las cuerdas antes de ahorcarse por bulerias. Que no solo conozco su última pesadilla, también las mil anteriores. Yo se que no tengo cojones a decirle que no a nada, porque tengo más deudas con su espalda, de las que nadie tendrá jamás con la luna. ¡Y mira que hay tontos enamorados en este mundo! Que se la cara que pone cuando se deja ser completamente ella, rendida a ese puto milagro que supone que exista. Que la he visto volar por encima de poetas que valían mucho más que estos dedos. Y la he visto formar un charco de arena rompiendo todos los relojes que la puso el camino. La he visto hacerle competencia a cualquier amanecer por la ventana. No me hablen de paisajes si no han visto su cuerpo. Que lo de "Mira si, un polvo es un polvo" y eso del tesoro de rojo pintado sobre sus uñas y solo los sueños pueden posarse sobre las cinco letras de su nombre. Que te entiendo. Que yo escribo sobre lo mismo, sobre la misma. Que razones tenemos todos, pero yo muchas más que vosotros.

domingo, 8 de junio de 2014

Eres justo lo que quiero

Como un cigarro para un fumador.Como ese último sorbo de ginebra para un alcohólico. Ese chute para un drogadicto. Eres pura adicción. Eres como esas mañanas de sol en invierno, como esos soplos de viento en verano. Eres el placer de tocar el suelo con los pies descalzos o el lado más frío de la cama en verano. Eres todo lo bueno y, a la vez, todo lo malo. Eres todo lo que me hace bien y, al mismo tiempo, mal. Eres lo que quiero. Muchas veces te consigues convertir en algo más que todo eso. Algo más, algo fuerte, ajeno a todos los sentidos. Eres todo eso que me hace desvariar. Eres justo lo que quiero.