viernes, 25 de octubre de 2013

Gracias por todo

Hoy, que mi inspiración literaria sigue su curso y va en aumento, va por vosotros.
Gracias por darme el don de la vida, por no renunciar a mi cuando aún estaba en el vientre materno. Gracias por cuidarme cuando era un bebé indefenso, por el cariño y la paciencia cuando todo iba mal. Por ser así como sois. Gracias por los consejos que me dais, por quererme cada día un poco más. Gracias por aguantarme estos 19 años, por caminar siempre al revés. Gracias, por asumir el papel de padres lo mejor que habéis podido. Gracias por cada valor que me habéis transmitido, por cada fundamento, por cada creencia. Gracias por enseñarme a vivir con lo poco que tengo y a disfrutar cada día de mi vida saboreandolo. Gracias por enseñarme a dar todo de mi misma y a no rendirme. Gracias por llamarme "guapa" y por subirme la autoestima. Gracias por la humildad con la que me habéis hecho crecer. Gracias por estar ahí siempre, en los buenos y malos momentos, en segundo plano, viendo como me caía y podía levantarme sin problemas. Gracias por sentiros orgullosos de mis logros, por animarme y no dejar que nunca me rinda. Gracias por quererme como soy, con mis defectos y todo. Gracias por no juzgarme cada vez que he tomado una decisión, aun sabiendo que podía equivocarme. Gracias por cada abrazos, cada sonrisa, cada beso, cada cariño que me habéis dado sin pedirlo. Gracias por aguantar mis bajones, por escuchar mis problemas. Gracias por cada "te quiero" en la distancia. No sabéis lo que llena escucharlo salir de vuestra boca. Gracias por cada momento de risas, por cada momento vivido con vosotros. Gracias por hacerme entender que la vida se basa en algo más que trabajar, estudiar y tener dinero. Gracias por enseñarme a querer y valorar a las personas, sin juzgarlas. GRACIAS POR TODO.
Gracias porque como padres estáis siendo los mejores que una puede tener. Os quiero,papá y mamá 

domingo, 20 de octubre de 2013

It´s time to change

Es complicado descubrir que ya no puedo recurrir a nadie para tomar ciertas decisiones, que ya es hora de abandonar a la niña que se escondía tras las faldas de mi madre o que va llorando a ella en busca de una solución. Es hora de abandonar todo. Es momento de mentalizarme de que estoy sola para decidir. Que si caigo se que tengo a gente a mi lado, pero si triunfo también les tendré. Es momento de levantar la cabeza, de seguir adelante y no preocuparme por el pasado. No todas las personas son iguales y es muy sencillo generalizar. Generalizando a veces cometemos errores y podemos llegar a distanciarnos de personas que consideramos importantes.Es tiempo de reir, de llorar, de lo que sea. Momento de afianzar mis estudios y asegurar mi vida aquí, en Oviedo, que es donde quiero estar. Es tiempo de mostrarme fuerte, de confiar en mi misma y de aceptar cada cosa que me venga. No soy la más indicada para juzgar a nadie porque a defectos no hay quien me gane. Es momento de hacerme cargo de lo que digo y acarrear las consecuencias. Es momento de enamorarme ¿Por qué no? Pero de enamorarme de verdad, de esa persona que me haga sentir especial y que me proteja. De esa persona a la cual no me importe darle todo de mi, que no me importe pasar cada minuto del dia a su lado. Que me haga sonreir. Pero sobre todo que me haga confiar. Quiero a alguien a quien darle todo lo que tengo sin pedir nada a cambio. Es hora de amar incondicionalmente. Tambien es tiempo de cometer errores ¿Por que no? De coger un camino y retroceder o atajar o lo que sea. Se terminaron las llamadas pidiendo permiso o preguntando. Es tiempo de cojer mi vida y dirigirla yo misma. Haga lo que haga se que tendré a mis padres y amigos a mi lado, y a mis hermanas. Que ninguno me va a juzgar ni va a intentar dirigir mi vida. Porque a partir de hoy es momento de crecer.

jueves, 29 de agosto de 2013

No juzgues, y piensa por ti mismo.

Una persona te puede caer mal, por su forma de ser o por su trato contigo, porque es difícil llevarse bien con todos los seres humanos de la tierra. Una persona puede cometer errores porque aquí el que sea libre de pecado que tire la primera piedra. Pero no por ello creo que se pueda juzgar a alguien sin compasión. Es cierto que todos cometemos errores, en mayor o menor medida. A mi desde pequeña me han enseñado que de tus propios errores y de los errores del vecino se puede aprender. Que si te das un tortazo pues te levantas y sigues adelante. Y ante todo me han enseñado que no se juzga a alguien por lo que ha sido, ni por lo que es. Somos libres de ir y venir de donde nos de la gana, no creo que sea necesario tener que dar explicaciones. Somos libre de darnos con una, dos, tres o las piedras que nos de la gana. Pero si somos libres para todo esto, también somos adultos para aprender. Creo que a una persona dispuesta y trabajadora no hay que despreciarla por lo que ha sido o por lo que es, e incluso por los errores que ha cometido. Si todos hiciéramos eso con las personas que nos rodean terminaríamos trabajando solos y viviendo en nuestra propia nube de algodón. En el fondo, mal que nos pese, terminamos necesitando a las personas. Igual que una pirámide egipcia no la construyó una sola persona, lo mismo pasa con nuestras vidas. No la creamos y modelamos nosotros solos. Siempre tenemos a gente a nuestro lado que, mejor o peor, nos ayudan a modelar nuestro camino y a aprender, cada uno a su manera, pero aprender. Creo que incluso yo he cometido errores garrafales, de los de "tierra trágame" pero siempre y digo SIEMPRE, se me ha concedido el don de la duda y las oportunidades. Si a nosotros mismos nos lo hacen, confían en nosotros y nos dejan volverlo a intentar... ¿Por qué no podemos ser así con todo el mundo? Creo que nadie está en la condición de juzgar al resto. Porque la perfección no existe. Somos seres imperfectos en un mundo en el que la sociedad influye tanto en lo que pensamos que no podemos opinar por nosotros mismos porque en cuanto alguien nos lleva la contraria creemos que nos van a lavar el cerebro. Ahora, si todos pensáramos igual, ¿Qué gracia tendrían las relaciones? No me refiero a amor solo, sino los amigos, la familia, los conocidos... No podemos pensar todos por igual, todo se vuelve monótono.

martes, 27 de agosto de 2013

Microrrelato inspiración.

"La chica sonríe, pero su sonrisa no hace más que esconder lo que verdaderamente siente. Sus auriculares hacen que Pablo Alborán y Malú retumben en sus oídos con "Vuelvo a verte". Odia estar sola, relativamente, tiene a sus amigas y a su familia, pero Madrid se convierte en una ciudad muy grande sin sus abrazos, besos, caricias, palabras, paseos infinitos. En el fondo, el rol de chica fría y valiente no acaba de cuadrarle. Quiere volver a sentir las mariposas en el estómago, unos brazos que la agarren fuerte, alguien que la susurre cosas bonitas, alguien que nunca la abandone. Sabe que los príncipes azules no existe, pero ese chico especial sí. Y así poco a poco vaga libremente por las calles de Madrid. Con parejas que ni se percatan de su presencia. Con parejas enamoradas, o eso parece."

Nadie elige con quien enamorarse, ni cuando, ni la edad.

Ella sonríe como una estúpida. Lo lleva haciendo desde hace semanas. Hacía meses que no se sentía tan llena. Y es que ese chico consigue sacarle lo mejor de ella misma. Se siente llena. Nada ni nadie puede vaciar un corazón tan lleno de amor. Aunque sabe perfectamente que los corazones no se llenan de golpe y porrazo, sino poco a poco. Le encanta. No le importa nada si es a su lado. No quiere perderle. Abrazos, besos, miradas, caricias, sonrisas absurdas, palabras bonitas... ¡Es tan feliz! Poco a poco va recordando como se hacía la dura, como ella misma decía "Yo nunca me volveré a enamorar". Ahora no sabe hacer otra cosa más que tragarse sus palabras y pensar en él. Se siente como una niña pequeña, pero no la importa. Ahora sabe que ese tiempo que ha pasado sola, disfrutando de si misma, de las personas que la rodeaban, de aquellos que si son amigos de verdad, la ha venido bien. No quiso lanzarse a aventuras sin sentido después de aquel 18 de Enero. Y pensar que ha tenido que pasar un año y siete meses para volverse a enamorar. Así si. Porque esto no es una historia pasajera. Esta es su historia. Por fin vuelve a confiar en una persona del sexo opuesto. Es tan duro abandonar el rencor y el miedo que le parece mentira haberlo conseguido. 
No sabe ni como ni por qué, pero así ocurrió. No estaba premeditado, lo cual hace que esta historia sea más especial aún. Nadie les obligó, todo fue surgiendo poco a poco, aunque quizá un poco rápido. Pero no es tiempo para lamentos... Quiere seguir siendo feliz a su lado.
Él sonríe, parecen dos estúpidos enamorados. No lo parecen. Lo son. Y es que cuando alguien se enamora no elige el sitio, ni la persona, ni la edad, ni el momento. Todo viene solo, pero a su momento.

miércoles, 15 de mayo de 2013

Buenos días con sabor a sus besos

Era despertar cada mañana y no verle. Ya no sentía su cuerpo calentito abrazarla durante toda la noche. Ya no se despertaba y lo primero que veía era su cara. ¡Incluso hasta dormido era guapo! Se terminó su voz mientras cantaba en la ducha, llegar y verle concentrado entre sus cosas. Se esfumaron los detalles, mínimos e insignificantes como una nota o una rosa, pero especiales para ella como el mejor colgante de oro. Ya no estaban esas noches en las que sobraban las palabras. Sus camisas, su fragancia. Es como si nunca hubiera existido, como si no hubiera dejado huella física en su vida.
Han desaparecido sus CD´s amontonados por el suelo a falta de espacio, su música a todas horas. Esas fotos a escondidas en las que tan guapo salía. Se terminaron los abrazos inesperados, su manera de sonsacar las cosas y de ponerlo todo patas arriba con tal de sacarla una sonrisa. Se terminó cada juego, cada caricia, cada deseo...
Perdió el tiempo en disputas tontas, en lágrimas caídas sin sentido, en gritos... Si por ella fuese, retrocedería y cambiaría todo. Aprendería a no ser tan cabezota y pedirle perdón, a no ser tan despistada, a dejar las cosas colocadas... Le querría cada día un poco más que el anterior y se lo demostraría...
Pero ya es tarde, tarde para cualquier arrepentimiento a última hora. Él optó por su trabajo, ella por sus libros y poco a poco sus caminos se fueron separando.
Ahora se ven por la calle y son dos desconocidos... ¿Dónde quedaron esas miradas que lo decían todo? ¿A dónde han ido los "Buenos días" con sabor a sus besos?

jueves, 28 de febrero de 2013

Cuando pierdes a alguien te das cuenta de lo importante que era saber que estaba ahí. Siempre.

Sonrío. Me salen carcajadas. Pero no estoy bien. Aún no he llorado. Ni recordando. Ni hablando de ti. Quiero gritar. Gritar tan fuerte que me quede sin respiración. Siento que me han faltado cosas de decirte. Recordarte lo mucho que te quiero. Me arrepiento de cada fin de semana que me negué a ir a la Residencia por no "sufrir". ¿Ahora qué? Solo me quedan recuerdos, y algunos difuminados. No quiero rezar con mis padres. Quiero encerrarme y chillar...

Recuerdo tu manía por darnos cocido. Era lo único que comía cuando iba a veros. Tus gritos cuando nos acercábamos a la cocina de lumbre y cuando nos poníamos a escalar el pequeño montículo de tierra que hay en vuestra casa. Cómo nombrabas a todos los nietos hasta que llegabas a mi nombre. Quizá tenga más recuerdos pero apenas vienen a mi mente.

Cuando pierdes a alguien te das cuenta de lo importante e imprescindible que era saber que, al menos, estaba ahí.

Solo puedo decir que no me arrepiento de nada. Tengo un montón de cosas que agradecerte. Que siempre te recordaré con tu bata y zapatillas, tu sonrisa cuando nos veías felices. Tú y la manía de decir "estáis muy delgadas".

Ahora estás con tu amante asturiano, ¡cómo tú decías!, quien te iba a decir a ti que ese amante asturiano del que te acordabas en tus últimos meses iba a ser el amor de tu vida. Te Quiero.

lunes, 25 de febrero de 2013

Ella.

Me duele verla mal. Cada una de sus lágrimas es un golpe en mi pecho. Me siento inútil por no poderla ayudar. Por no poder sacarla una sonrisa. Y todo por vuestra culpa. Me he cansado de ser la que calla y otorga. Cansada de estos cinco meses de humillación y acoso. Cansada de las amenazas en mi casa. Tengo miedo. Pero se acabó el tiempo. No voy a consetir más humillaciones y ataques. Vosotros habéis decidido que esto sea la guerra y no pienso quedarme de brazos cruzados. No voy a consentir más lágrimas,  ni más prohibiciones de gente como vosotros. No quiero seguir viendo como acabáis poco a poco con su fuerza, como sacais mis nervios y me jodeis la vida. "Si no puedes con el enemigo únete a él" He permitido que os metáis conmigo, he tragado lo intragable pero no voy a aguantar que mi madre siga así. La guerra la comenzásteis vosotros hace cinco meses, ahora la pelota está en mi campo.

jueves, 21 de febrero de 2013

Carta a cualquier persona

Hola:

Soy una más de los tantos españoles que a poco más y no tienen para comer. La culpa supuesta de la crisis. Vivo en un país de hipócritas, egoístas y cualquier sinónimo que se te venga a la cabeza. Soy estudiante, al menos intento serlo que con la beca que me coceden se me quitan las ganas de seguir. Quiero llegar a la Universidad pero visto el panorama solo llegarán los ricos. A pesar de eso soy feliz, o intento serlo con lo poco que tengo. Sobre todo vivo en un país de imbéciles ignorantes. Gente que se dedica a criticar, humillar, y decir todo tipo de mentiras sobre los demás sin saber cómo viven. Vivo en un país en el que tus vecinos deciden mandarte a los tribunales si no pagas comunidad o si tienes mucha deuda. Lo hacen sin saber si el banco te va a embargar la casa o sin saber si apenas comes. Lo hacen con egoísmo. Antes de la crisis de mierda podías tener la deuda de comunidad que no pasa nada... Ahora todo cambia o pagas o juicio, simple y sencillo. Pero yo me pregunto con qué derecho lo hacen. Si una familia está viviendo penurias tienen los vecinos que seguir jodiendo la vida económica, y esta es la cruda realidad. Si no tienes dinero para pagar la comunidad, te jodes. Si no tienes dinero para comer, te jodes. Si llegas mal a fin de mes, te jodes. Pero estás obligado a pagar una comunidad elevadísima o ellos se quedan sin ascensor o sin cualquier otra zona común. Vecinos hipócritas, egoístas y ricos visto el panorama... Esta es mi realidad, pero no solo la mia. Es la realidad de muchos españoles que viven situaciones económicas precarias y no se arreglan, les siguen jodiendo por otros lados.
No espero que esto tenga reivindicaciones, ni quejas. Solo pongo palabras a la situación de muchos adolescentes que se sienten frustrados mientras ven como su familia se muere de hambre y no pueden hacer nada.

miércoles, 20 de febrero de 2013

Si la vida fuera fácil, ¿qué sentido tendría vivirla?

Me gustan los retos. Volverme loca buscando una solución a un problema. No me gusta que me lo den todo hecho. Los "prohibido" son mis sitios preferidos. Creo en el hecho de que todo se puede lograr, todo lo que se sueña. ¿El amor? A primera vista, sonrisa, palabra, caricia. Amor a distancia, para toda la vida. ¡Cualquier amor! No creo en los príncipes azules, pero si en los cabrones que se pueden transformar, luchando por algo que vale la pena. Me gusta estar enamorada con cada pro y cada contra. Soy cabezota y competitiva.
No busco agradar a todo el mundo, ellos apenas me agradan a mi. No soy egoísta, pero si un poco celosa y lo mio es solo mio. Me enamoro con mucha facilidad y casi siempre de los más difíciles.
No espero que todo el mundo esté conforme con lo que hago, si cuando escribo no se molesta nadie significa que no he escrito nada interesante. Dime "no" e intentaré lo imposible para transformarlo en un "sí". Soy muy simple, más, incluso, que el mecanismo de un chupete. Odio que me ignoren.
De los errores se aprende y el ser humano si choca dos veces con la misma piedra es que le da morbo. ¿Quién te obliga a cometer el mismo error siempre?

viernes, 8 de febrero de 2013

Todo es tan sencillo y tú lo hacer tan complicado...

Me enamora. Que me llamen "tonta". "Boba". "Enana". Un "Buenos Días Princesa/Fea" y me tienes ganada. No quiero agobiar. Ni que me agobien. Pero si saber de la persona que me interesa, al menos, una vez al día. Me gustan las menciones de twitter inesperadas. Esos whatsapps que no espero que lleguen, pero llegan. Me encanta picar. Que me piquen. Saber que si estoy mal, tengo a alguien al otro lado del ordenador o teléfono o incluso a mi lado, para que me diga lo especial que soy y que no vale la pena estar mal. No creo en los "para siempre". Se que a mi edad las cosas se terminan. Pero me encantan los "hasta mañana". Nunca sé lo que puede pasar para que algo falle. Suficiente he tenido como para no aprender. No quiero un amor de película. Ni príncipe azul, amarillo, verde, rojo o arco-iris entero. Quiero a alguien que me quiera. Sin medida. No necesito saber lo mucho que me quieres un día si al siguiente voy a perderte... Mi madre dice que soy muy enamoradiza y por algo será. Me encantan los paseos de la mano, esos que no llevan a ningún sitio. Las escapadas. No quiero regalos. Prefiero una conversación boba que todo el oro del mundo. Ya ves que soy simple. ¿Tanto te cuesta conseguir hacerme feliz?

domingo, 27 de enero de 2013

A cada cerdo le llega su San Martín

No pretendo agradar a nadie con esta entrada. Quién se de por aludido, sabe donde vivo. Critico a esta sociedad materialista. Sociedad masoca. Sociedad toca pelotas. Gente a la que considerabas de suma confianza en tu vida que por algo pequeño te falla. Gente cobarde. Personas que prefieren meter cizaña a arreglar las cosas. Protesto por esas personas. Que para vivir bien intentan hundir al prójimo en la miseria. Critico las injusticias. No me gusta callarme lo que pienso. Si algo está mal, lo digo y punto. Se que eso en un futuro me traerá problemas. Porque más vale callar y otorgar. Pero mientras pueda seré libre, bajo la educación que mis padres, con esfuerzo y dedicación, me inculcaron. Ellos me enseñaron que el dinero no da la felicidad. Que no es más fuerte el que más chilla sino el que espera el momento adecuado. Que a veces hay que guardar el orgullo y pedir perdón. Se perfectamente cuando tengo la culpa de las cosas y mi capacidad para arrepentirme. Pero hay veces que no se da el caso. No quiero agradar a todo el mundo, salvo a esas personas que considero especiales en mi vida. A esas personas las adoro. ¿Los demás? Podéis seguir en esa línea. Poco me va a afectar

jueves, 24 de enero de 2013

Ahora.

Entre lágrimas. Canciones. Premios 40 Principales. Cosas pendientes. Horas interminables. Besos deseados. Pienso en ti. Me encantaría cruzar ese puerto que nos separa, que me impide tenerte a mi lado. Querría abrazarte. Decirte al oido, mientras acaricio tu pelo, que la vida continúa. Que no me gusta verte triste y que el alma se me desgarra al no poder hacer nada. Que la impotencia y el dolor que siento es enorme. Me jode no poderte abrazar ahora, que se que lo necesitas. Me desahogo escribiendo, entre lágrimas y una tila. Porque recuerda enano D que te quiero, que eres mi vida y no pienso abandonarte nunca. Porque nunca significa para siempre.

sábado, 5 de enero de 2013

Por fin, solo me importas tú

Un enano. Pitufo. Picón. Niñerón. Payaso. Mimoso. Especial. Todos los apelativos cariñosos que se o puedan ocurrir, y los que no. Esos nervios. Tenerle a mi lado. Sonrisas complices. Susurros dulces. Paseos agarrados de la mano, sin importarme el resto, importandome solo él. Una tarde única, la mejor del año. Pagaría por 50 iguales. Planes de futuro que algún día se cumplan, o no. ¡Quién sabe! Besos. Abrazos. Estupideces o "sobradas" cono él las llama. Clases de arte express. Después de tantísimo tiempo esperando le tenía a mi lado. Sus ojos. Su sonrisa. Su pelo suave. Que se "enfadara" porque mi hermana dijera que era paseable.Tenerle que buscar un sonrisa. Fingir enfadarme para que me buscara. Morderle. Picarle. Éramoa dos chiquillos, dos pequeños enamorados. A pesar de ser nueve meses mayor que él me sentía protegida a su lado y un poco enana. Escucharle hablar, ese acento asturiano que tanto me gusta. Ver atardecer a su lado. El hecho de que se sintiera observado. Esa tarde que nunca pasará. Por un eterno diez. Por nuestro enerto diez. Te quiero pitufo

miércoles, 2 de enero de 2013

Un historia que tiene como autor copas de alcohol.

Hoy podía haber sido un día especial. Tenerte a mi lado. Sonreirte como una estúpida. Besarte. Decirte "Te Quiero". En cambio no, aquí estoy, muerta del asco en casa. Sin ganas de salir. Con muy mal humor. Y es que cuando a una persona ya le dicen tantas veces que no se termina acostumbrando a la negación... Lo cual no es bueno. Se pierden esperanzas. Ilusiones. Cualquier atisbo de felicidad se desvanece cuando ya se sabe la respuesta. He aprendido a vivir con lo poco que tengo. Una historia de dos que se esconde debajo de la alfombra. No ve el sol. Qué difícil es abrir unos ojos cerrados cuando el futuro es tan oscuro. Será mejor asimilar que el mundo es un poco complejo. Hoy quiero vivir pensando que he sido yo la que ha tomado la decisión de escapar de esos títeres que quieren ser la voz en off de mis recuerdos. De eso que hace que te pase algo para que no puedas venir. Y es que ya estoy perdiendo las ganas de todo.