jueves, 28 de febrero de 2013

Cuando pierdes a alguien te das cuenta de lo importante que era saber que estaba ahí. Siempre.

Sonrío. Me salen carcajadas. Pero no estoy bien. Aún no he llorado. Ni recordando. Ni hablando de ti. Quiero gritar. Gritar tan fuerte que me quede sin respiración. Siento que me han faltado cosas de decirte. Recordarte lo mucho que te quiero. Me arrepiento de cada fin de semana que me negué a ir a la Residencia por no "sufrir". ¿Ahora qué? Solo me quedan recuerdos, y algunos difuminados. No quiero rezar con mis padres. Quiero encerrarme y chillar...

Recuerdo tu manía por darnos cocido. Era lo único que comía cuando iba a veros. Tus gritos cuando nos acercábamos a la cocina de lumbre y cuando nos poníamos a escalar el pequeño montículo de tierra que hay en vuestra casa. Cómo nombrabas a todos los nietos hasta que llegabas a mi nombre. Quizá tenga más recuerdos pero apenas vienen a mi mente.

Cuando pierdes a alguien te das cuenta de lo importante e imprescindible que era saber que, al menos, estaba ahí.

Solo puedo decir que no me arrepiento de nada. Tengo un montón de cosas que agradecerte. Que siempre te recordaré con tu bata y zapatillas, tu sonrisa cuando nos veías felices. Tú y la manía de decir "estáis muy delgadas".

Ahora estás con tu amante asturiano, ¡cómo tú decías!, quien te iba a decir a ti que ese amante asturiano del que te acordabas en tus últimos meses iba a ser el amor de tu vida. Te Quiero.

lunes, 25 de febrero de 2013

Ella.

Me duele verla mal. Cada una de sus lágrimas es un golpe en mi pecho. Me siento inútil por no poderla ayudar. Por no poder sacarla una sonrisa. Y todo por vuestra culpa. Me he cansado de ser la que calla y otorga. Cansada de estos cinco meses de humillación y acoso. Cansada de las amenazas en mi casa. Tengo miedo. Pero se acabó el tiempo. No voy a consetir más humillaciones y ataques. Vosotros habéis decidido que esto sea la guerra y no pienso quedarme de brazos cruzados. No voy a consentir más lágrimas,  ni más prohibiciones de gente como vosotros. No quiero seguir viendo como acabáis poco a poco con su fuerza, como sacais mis nervios y me jodeis la vida. "Si no puedes con el enemigo únete a él" He permitido que os metáis conmigo, he tragado lo intragable pero no voy a aguantar que mi madre siga así. La guerra la comenzásteis vosotros hace cinco meses, ahora la pelota está en mi campo.

jueves, 21 de febrero de 2013

Carta a cualquier persona

Hola:

Soy una más de los tantos españoles que a poco más y no tienen para comer. La culpa supuesta de la crisis. Vivo en un país de hipócritas, egoístas y cualquier sinónimo que se te venga a la cabeza. Soy estudiante, al menos intento serlo que con la beca que me coceden se me quitan las ganas de seguir. Quiero llegar a la Universidad pero visto el panorama solo llegarán los ricos. A pesar de eso soy feliz, o intento serlo con lo poco que tengo. Sobre todo vivo en un país de imbéciles ignorantes. Gente que se dedica a criticar, humillar, y decir todo tipo de mentiras sobre los demás sin saber cómo viven. Vivo en un país en el que tus vecinos deciden mandarte a los tribunales si no pagas comunidad o si tienes mucha deuda. Lo hacen sin saber si el banco te va a embargar la casa o sin saber si apenas comes. Lo hacen con egoísmo. Antes de la crisis de mierda podías tener la deuda de comunidad que no pasa nada... Ahora todo cambia o pagas o juicio, simple y sencillo. Pero yo me pregunto con qué derecho lo hacen. Si una familia está viviendo penurias tienen los vecinos que seguir jodiendo la vida económica, y esta es la cruda realidad. Si no tienes dinero para pagar la comunidad, te jodes. Si no tienes dinero para comer, te jodes. Si llegas mal a fin de mes, te jodes. Pero estás obligado a pagar una comunidad elevadísima o ellos se quedan sin ascensor o sin cualquier otra zona común. Vecinos hipócritas, egoístas y ricos visto el panorama... Esta es mi realidad, pero no solo la mia. Es la realidad de muchos españoles que viven situaciones económicas precarias y no se arreglan, les siguen jodiendo por otros lados.
No espero que esto tenga reivindicaciones, ni quejas. Solo pongo palabras a la situación de muchos adolescentes que se sienten frustrados mientras ven como su familia se muere de hambre y no pueden hacer nada.

miércoles, 20 de febrero de 2013

Si la vida fuera fácil, ¿qué sentido tendría vivirla?

Me gustan los retos. Volverme loca buscando una solución a un problema. No me gusta que me lo den todo hecho. Los "prohibido" son mis sitios preferidos. Creo en el hecho de que todo se puede lograr, todo lo que se sueña. ¿El amor? A primera vista, sonrisa, palabra, caricia. Amor a distancia, para toda la vida. ¡Cualquier amor! No creo en los príncipes azules, pero si en los cabrones que se pueden transformar, luchando por algo que vale la pena. Me gusta estar enamorada con cada pro y cada contra. Soy cabezota y competitiva.
No busco agradar a todo el mundo, ellos apenas me agradan a mi. No soy egoísta, pero si un poco celosa y lo mio es solo mio. Me enamoro con mucha facilidad y casi siempre de los más difíciles.
No espero que todo el mundo esté conforme con lo que hago, si cuando escribo no se molesta nadie significa que no he escrito nada interesante. Dime "no" e intentaré lo imposible para transformarlo en un "sí". Soy muy simple, más, incluso, que el mecanismo de un chupete. Odio que me ignoren.
De los errores se aprende y el ser humano si choca dos veces con la misma piedra es que le da morbo. ¿Quién te obliga a cometer el mismo error siempre?

viernes, 8 de febrero de 2013

Todo es tan sencillo y tú lo hacer tan complicado...

Me enamora. Que me llamen "tonta". "Boba". "Enana". Un "Buenos Días Princesa/Fea" y me tienes ganada. No quiero agobiar. Ni que me agobien. Pero si saber de la persona que me interesa, al menos, una vez al día. Me gustan las menciones de twitter inesperadas. Esos whatsapps que no espero que lleguen, pero llegan. Me encanta picar. Que me piquen. Saber que si estoy mal, tengo a alguien al otro lado del ordenador o teléfono o incluso a mi lado, para que me diga lo especial que soy y que no vale la pena estar mal. No creo en los "para siempre". Se que a mi edad las cosas se terminan. Pero me encantan los "hasta mañana". Nunca sé lo que puede pasar para que algo falle. Suficiente he tenido como para no aprender. No quiero un amor de película. Ni príncipe azul, amarillo, verde, rojo o arco-iris entero. Quiero a alguien que me quiera. Sin medida. No necesito saber lo mucho que me quieres un día si al siguiente voy a perderte... Mi madre dice que soy muy enamoradiza y por algo será. Me encantan los paseos de la mano, esos que no llevan a ningún sitio. Las escapadas. No quiero regalos. Prefiero una conversación boba que todo el oro del mundo. Ya ves que soy simple. ¿Tanto te cuesta conseguir hacerme feliz?