*Toc, toc, toc* ¡Ey, tú! Si, te estoy hablando a ti. ¿Me ves? Soy tu. O una realidad de ti misma. Soy lo que tú quieras que sea. Pero no voy a ser en lo que él quiere conventirte. Lo que ves aquí es una mujer fuerte, guapa e inteligente. Que no se deja comer por nadie. Una mujer libre y autónoma. Soy la mejor parte de ti misma, aunque no quieras reconocerlo. Soy tus ganas de vivir, de levantarte cada mañana. Ven, acércate un poco más. ¿Me ves mejor? Fíjate bien. Ahora sí. Ese brillo en los ojos te pertenece. Es aquello que debe darte fuerzas para romper con tu pasado y lanzarte a un futuro mejor. El chico al que estás enganchada no te quiere. Bueno, desde este lado se ve que te quiere, pero hundir. Terminar con tu personalidad para siempre y que seas suya. No creas sus palabras de amor, cuando cinco minutos después te lanza amenazas. Recuerda que quien importa eres tú y que lo que dice puede hacerse realidad. Y tú y yo podríamos desaparecer para siempre. ¿Dónde quedará todo lo que nos queda por vivir? Mañana cuando me veas sonrie y cómete el mundo.
Te quiero con locura,
Fdo. Tu reflejo
"Amor y deseo son dos cosas diferentes; que no todo lo que se ama se desea, ni todo lo que se desea se ama" Miguel de Cervantes
domingo, 3 de abril de 2016
Tu reflejo
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Muy buena reflexión, x suerte realizada a tiempo y te deseo q esa situación no vuelva a repetirse.
ResponderEliminarQué alguien te ame de verdad y tú a él, te aceptará tal cual y tú a él sin necesidad de que necesitéis deciros nada de cambiar. Seréis felices